Hace unos días, mi hijo veía un reportaje en la televisión en que una señora mayor, bajita de melena roja contaba batallitas. Eso es lo que él vió.
Se sorprendió al oirme cantar las canciones que iban a apareciendo. Puede creerse cualquier cosa de su madre con naturalidad, pero creo que andaba entre alucinado y divertido cuando le contaba cosas de esta señora de mi edad con su grupo Kaka Deluxe, cuando les cantaba a mis alumnos en versión light "Soy la funcioinaria asesina", cuánto envidíabamos las chicas de pueblo las rastas de Alaska, o que aquella canción "Ni tú , ni nadie" era uno de nuestros "gritos de guerra" en los 80.
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