Esta mañana terminé, junto al desayuno, la última historia de Agustín Fernández Paz que ha caído en mis manos: Aire Negro. Este autor sigue fascinándome por la sencillez de su estilo narrativo, la capacidad para crear intriga y el exquisito gusto con que nos introduce en la tradición cultural y mitológica gallega. Con sus novelas, de algún modo, me hace recuperar el gusto por "escuchar historias". De nuevo , como en Cartas de invierno, combina magistralmente el terror psicológico y el fantástico creando una atmósfera de implicación emocional con los personajes.
La novela está clasificada de "literatura juvenil", no obstante , yo la veo apropiada también para adultosy adultas que quieran disfrutar de buenos ratos de lectura.
Os dejo aquí una copia de la reseña de la página http://www.filix.org/
Tres años después de ocurridos los hechos, un ex psiquiatra nos cuenta una experiencia estremecedora con su primera paciente. Vamos conociendo por él y por la voz narradora de Laura Novo la historia de la aparición de la Gran Besta, un ser monstruoso que habita en una cueva. Se confirma así la mitología del lugar, que tan bien conoce uno de los trabajadores de la casa de turismo rural en la que se vino a hospedar la protagonista. La venganza por la intromisión en ese territorio ajeno corta la nueva vida que, con la tranquilidad del espacio idílico y la felicidad del reencuentro con un viejo amor, busca la anteriormente periodista crítica en Madrid.Con elementos de novela psicológica y de misterio, esta historia de amor imposible es una auténtico viaje al corazón de las tinieblas que trasciende las limitaciones de edad en las que la sitúa su edición en una colección juvenil.
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