Memorias de África

Hoy , al visitar uno de los blogs que me gusta seguir ,"Un pont de mar blava", sonaba una de las piezas musicales que más me conmueven: El tema central de "Memorias de África". Me transporta de inmediato a las llanuras de Kenia. En mi memoria no hay calor, no hay pobreza, no hay colonialistas....sólo la elegante armonía del sorprendente paisaje, el romance tan especial e íntimo y la belleza de la música.

Yo tenía una granja en África a los pies de las colinas del Ngong…


Sidney Pollack hizo realidad el sueño de muchos realizadores al llevar a la gran pantalla la adaptación de la novela homónima de Isak Dinesen, que en realidad era el pseudónimo literario de Karen Blixen, protagonista de esta historia autobiográfica, justo en el centenario de su nacimiento.

Esta película es el relato que Blixen, interpretado por Meryl Streep, hace de su vida en un cafetal de Kenia, al cual llegó en 1914 junto con su esposo sueco el barón Bror Blixen (Klaus Maria Brandauer). Este matrimonio se une por conveniencia, aunque ella, al llegar a África, acaba esperando algo más de esta relación. Pero la promiscuidad de su esposo hace que finalmente se separen. Denis Finch Hatton, encarnado por Robert Redford, un cazador profesional con un espíritu libre será el que le robe el corazón a Karen, regalándonos así una bella y especial historia de amor, con una pasión madura pero profunda entre dos personajes solitarios.

La voz en off del personaje de Karen Blixen nos invade de nostalgia mientras narra su vivencia en estas tierras, de dónde surge una pasión inesperada, Además de la historia romántica, el film refleja la convivencia entre los nativos de esta colonia británica y los europeos residentes allí, sobre todo en la relación de Karen Blinxen con los masai, así como el ambiente que se respiraba en la colonia ante la Primera Guerra Mundial.

La belleza de sus paisajes, dificilmente podrá borrarse jamás de nuestras retinas, gracias a la espectacular fotografía de David Watkin . Aproximadamente el setenta por ciento del rodaje se produjo en las cercanías de Nairobi y se puso gran esmero para poder ofrecer una representación auténtica de la industria keniana del café a principios del siglo XX. La música fue compuesta para la ocasión por el multipremiado John Barry, con unos temas inolvidables y preciosos, que evocan la majestuosidad de las tierras africanas y el delicado equilibrio del que pende la trama amorosa.

(TExto:http://www.cinedesiempre.com/)







3 comentarios:

Mercè Salomó dijo...

Siento no haber visto esta entrada antes. Disculpa!!

"Yo tenía una granja en África, a los pies del Ngorongoro..." Ahí voy a estar a primeros de octubre: en la casa-museo de Karen Blixen.

Sé que, cuando esté allí, no podré dejar de rememorar la película, que he visto casi una decena de veces. También sé, que se asomará alguna lágrima a mis ojos.

Cuento los días que faltan y me parecen muchos!!

Un abrazo!!

Nor dijo...

Es para mí un honor que una mujer con tu bagaje cultural y tus profundos valores solidarios haya entrado en este modesto espacio.
Me he alegrado muchísimo de encontrarte aquí aunque lo hago habitualmente en "Un pont de mar blava". Repito: un placer.

Mercè Salomó dijo...

Hasta hoy no había podido leer tu respuesta y has hecho que me sonrojara. Me considero una persona normal, sin nada a destacar. Bueno, quizás sí, destacaría que me duelen en lo más profundo de mi ser, las injusticias que hay en este mundo que nos ha tocado vivir.

Tienes un blog que me gusta y lo voy a enlazar con el mío, así seguiré de cerca tus pasos.

Un abrazo!!