Por los mineros atrapados en Chile

Mi recuerdo y mi esperanza para los 33 mineros atrapados a 700 metros de profundidad en un yacimiento en Chile. Por su esperanza. Ojalá no la pierdan.

Pakistán: Faltan ayudas



Las noticias que llegan desde Pakistán son desalentadoras. El país está sumido en el peor desastre natural de su historia, con más de 20 millones de personas  afectadas y aún no ha terminado. Continúan las lluvias, nuevas inundaciones , y acecha el peligro inminente de hambre y enfermedad. La ayuda internacional está llegando con cuentagotas, mientras miles y miles de personas sobreviven sin nada, con la perspectiva de un duro invierno sin nada.

Dicen las gentes entendidas que las necesidades humanitarias son mucho mayores que en Haití, pero la ayuda no llega, la comunidad internacional no despierta. Quizá porque el medio mundo con capacidad para donar está de vacaciones evadiendose de la realidad. Quizá porque una inundación puede ser una catástrofe más lenta, sigilosa, menos espectacular que un terremoto, un huracán o un tsunami. Quizá por la mala prensa que desde aquel país nos llega sobre integrismos, talibanes y corruptos....

En los últimos días he leído comentarios bastante desafortunados a este respecto. Algo que nunca creí encontrarme entre la gente corriente como "nada para Pakistán" "que les ayuden los islamistas" "que se pudrán los terroristas". Confío en que la gran mayoría sólo vemos gentes desesperadas que necesitan nuestra ayuda. Confío en que la gran mayoría todavía conservamos el sentido común y ese impulso irrenunciable por ayudar, por cooperar, por dar que nos hace un poco más "personas".

(Imagenes: Reuters)

La Tomatina de Buñol





Esta semana se ha celebrado la fiesta de la Tomatina en Buñol, la localidad donde he estado trabajando casi 20 años.Resulta curioso el contraste de la intensa afición de esta población por la música, con dos bandas de extraordinaria calidad, y el carácter totalmente opuesto de esta fiesta. Por una parte control, orden, armonía, arte. Por otro instinto, desenfreno, adrenalina. Contraste y complemento probablemente.


Esta curiosa fiesta cuyo único objetivo es lanzarse tomates tiene su origen a mediados del siglo XX con un comienzo anecdótico y casual. Incomprensiblemente lo que sólo es una actividad liberadora y divertida es considerada fiesta de interés turístico internacional. Somos así de paradójicos, supongo. Al menos me consuela pensar que el gentío no disfruta de la crueldad hacia los animales.

Estoy viva como fruta madura

Estoy viva

como fruta madura
dueña ya de inviernos y veranos,
abuela de los pájaros,
tejedora del viento navegante.

No se ha educado aún mi corazón
y, niña, tiemblo en los atardeceres,
me deslumbran el verde, las marimbas
y el ruido de la lluvia
hermanándose con mi húmedo vientre,
cuando todo es más suave y luminoso.

Crezco y no aprendo a crecer,
no me desilusiono,
ni me vuelvo mujer envuelta en velos,
descreída de todo, lamentando su suerte.

No. Con cada día, se me nacen los ojos del asombro,
de la tierra parida,
el canto de los pueblos,
los brazos del obrero construyendo,
la mujer vendedora con su ramo de hijos,
los chavalos alegres marchando hacia el colegio.

Si.
Es verdad que a ratos estoy triste
y salgo a los caminos,
suelta como mi pelo,
y lloro por las cosas más dulces y más tiernas
y atesoro recuerdos
brotando entre mis huesos
y soy una infinita espiral que se retuerce
entre lunas y soles,
avanzando en los días,
desenrollando el tiempo
con miedo o desparpajo,
desenvainando estrellas
para subir más alto, más arriba,
dándole caza al aire,
gozándome en el ser que me sustenta,
en la eterna marea de flujos y reflujos
que mueve el universo
y que impulsa los giros redondos de la tierra.

Soy la mujer que piensa.
Algún día
mis ojos
encenderán luciérnagas.

Gioconda Belli


Hoy uno de mis poemas preferidos de Gioconda Belli para mi mejor amiga. ¡¡Feliz cumple, Nor¡¡¡

Versión operística del Aserejé

La amiga Fauve me envió este vídeo que no había visto hasta hoy y que me apetecía compartir . Estoy un buen rato "esclafá" de risa. Me encanta este tipo de situaciones entre descontextualizadas y absurdas. Las caras de la soprano y las acciones finales del director son impagables. Unos minutillos agradables.

El señor Pip

El señor Pip es una conmovedora historia de la que disfruté el verano pasado. Otro de los estupendos regalos con los que suele sorprenderme mi amiga Pilar.La imagino absorta, registrando, escudriñando, aventurándose entre los estantes de la librería e imaginándonos en el deleite de cada una de las historias con las que nos obsequia.

En El señor Pip, Lloyd Jones nos presenta el poder de la lectura como creador de un mundo paralelo, como una realidad alternativa en que podemos refugiarnos cuando nuestro propio mundo es cruel o frío.

La protagonista, Matilda,  vive en Bouganville, una recóndita isla del Pacífico asolada por una guerra civil, en un poblado costero. Allí, el único hombre blanco que queda, el Sr. Watts, se decide a reabrir la escuela, aunque no es maestro. Se le ocurre impartir clase  leyendo cada día fragmentos de "Grandes esperanzas" de Dickens. Alternando la lectura del libro se le ocurre que los padres de los alumnos podrían ir a la escuela y dar consejos a los niños sobre aquellas cosas que crean necesarias y prácticas en la vida.

Las aventuras de Pip cautivan a los niños, en especial a Matilda que vive fascinada por el personaje, hasta tal punto en el que la línea entre realidad y ficción parece desdibujarse.Su madre no está muy de acuerdo y muestra su oposición al método de enseñanza al sentir peligrar su referente de adulta.
La tragedia caerá sobre el poblado cuando unos guerrilleros confundan a Pip con una persona real, creyendo que es  un rebelde que están escondiendo.

Lectura fácil, trama enternecedora y con un punto mágico muy atractivo.

La familia Telerín

Hace un tiempo, la amiga Violeta envió un vídeo para el Rincón de la Nostalgia.: Aquella familia Telerín, liderada por Cleo, que cada noche nos mandaba a dormir a todas las niñas y niños allá por los 60. Unos simpáticos y cándidos personajes animados nos trataban de enviar a dormir con una pegadiza melodía. Curioso. En aquel entonces el adoctrinamiento más que explícito: una familia numerosa y bien avenida, valores como el descanso y madrugar y rezos antes de acabar el día. Hoy , en un conocido programa del canal Cuatro también cantan una cancioncilla para los infantes: "Vete a dormir". Los tiempos cambian, afortunadamente, pero nunca se sabe si la evolución va a ser muy positiva: Esta tonadilla está interpretada por señores haciendo de "graciosos·, y ofrecen la visión de niños que dan el "tostón" y "no dejan vivir a sus padres". Parece que sólo hemos sabido cambiar de tópicos...¡¡¡Cómo somos¡¡¡